¿Qué significa el juego entre los ex peloteros del equipo industriales en Miami? ¿Acaso se trata de un encuentro entre nostálgicos deportistas de una y otra orilla? ¿Es un nuevo paso en la construcitva política de la Casa Blanca en relación al llamado intercambio Pueblo a Pueblo? No se trata de nada de eso.
Tampoco el encuentro deportivo tiene como meta un objetivo económico a priori. Las miras de sus organizadores están puestas un poco más allá. Esos juegos de béisbol constituyen otro eslabón en la larga cadena de acontecimientos diseñados por el aparato de la inteligencia castrista, en contubernio con inescrupulosos empresarios y políticos exiliados cubanos y estadounidenses, que luchan con todas sus fuerzas y usando todo tipo de artilugios y tácticas por eliminar el embargo económico que pesa aún en las relaciones entre la dictadura y EEUU.
Del mismo modo, al gobierno norteamericano le es más conveniente la estabilidad en la isla con los Castro en el poder que la libertad de los cubanos con posible ingobernabilidad que pueda resultar una seria amenaza para EEUU, por los peligros de que Cuba se convierta en refugio y base operativa del narcotráfico y el terrorismo internacional, y del éxodo masivo de miles de cubanos hacia las costas de la Florida.
La posible desaparición del subsidio venezolano, debido al colapso de la economía chavista y la incapacidad e inestabilidad de Nicolás Maduro, conllevan a que la única opción de sobrevivencia de la dictadura de La Habana pase por el apuntalamiento de Washington, mediante el relajamiento y futura eliminación del embargo.
El juego de pelota de los ex industrialistas, la visita a Cuba de Beyonce y su esposo Jay Z, la "sorpresiva" invitación del testaferro trovador Silvio Rodríguez al cantante exiliado Issac Delgado para cantar en un barrio de La Habana, el otorgamiento de EEUU de visas múltiples por un período de 5 años a los cubanos en medio del incidente del contrabando de armas descubierto con la detención del barco norcoreano en Panamá, la restauración del diálogo migratorio Cuba-EEUU tras años de estar suspendido... no hay jueguitos inocentes sino intenciones muy bien definidas.